Betty viene y me dice si ya hice las valijas sabiendo que, como de costumbre, tiraré unas cuantas pilchas adentro de un bolso unas pocas horas antes de que sea demasiado tarde.
Pero hoy, a la costumbre se suma el letargo y la pena de volver a pensar en qué significa irse de una vez por todas, estar o quedarse un rato más. Hoy, la falta de tiempo para planificar la partida parece una broma de mal gusto y la confirmación de que de todas maneras mejor que te agarres fuerte, porque nunca estás preparado para nada.
9 comentarios:
Cuesta ponerse uno en la valijita, imposible irse sin haber dejado todo lo que se deja. Y en la atenta selección de lo que se lleva y en la distraída resistencia de lo que se queda.
m
¿No será que somos lo que se queda, Martite?
Esta bueno salir pensando que se olvidó algo, facilita el encontrarlo en otro lado
¿pero cuál es el problema si se va para quedarse?
Manoneta
es lindo el modo en el que lo dice. Lo que pasa es que por estos días estoy un poco sensible con las ausencias, sabe...
Amperio, sin dudas hoy me quiero quedar con eso que me dice. Somos lo que dejamos.
Sr. Negro: ¿Le parece? Es que vengo distraída
Cuti: el problema es que que este post hablaba de demasiadas cosas para mí. Pero me puse crìptica, parece, nada más que para no ponerme patètica. Escribí para que me saludaran pero también para despedirme, orque se me mezclaron las cosas. ¿Me entiende?
A veces uno se siente descartable cuando el adiós es tan liviano .
Hello and goodbye , I loved your conversation !
Muy buen viaje!!! Se le va a extrañar.
Dicen que uno sabe después-
Nunca nunca el tiempo es suficiente para prepararse para la partida, y eso es todavia peor cuando uno sabe que no puede volver. Y que si quedaron cosas sin resolver o te olvidaste de poner algo en la valija, ya esta perdido.
Al menos hay que tratar de no sufrir por lo que dejamos olvidado y disfrutar de la estadia por venir...sin remordimientos.
Publicar un comentario